Magnum no es un helado.

No señor, es el detective privado de Hawai más famoso de la TV de los 80.
Interpretado por Tom Seleck, ejercía de segurata en la mansión del archimultimillonario y siempre ausente Robin Master, cosa que le dejaba mucho tiempo para zangonear y pluriemplearse como sabueso.
Seleck lo hizo tan bien que el público le encasilló en el papel. Así, cuando le vimos cuidado a un bebé en "Tres solteros y un biberón" veíamos a Magnum haciendo de papa; en "Runaway, brigada especial" veíamos a Magnum luchando contra unas arañas robóticas, e incluso vimos a un Magnum sosainas saliendo con Mónica de Friends!
Los secundarios de la serie tenían un importante peso. El gran Higgins (John Hillerman) mayordono a lo british de la finca de Master que mantenía continuos rifi-rafes con Magnum, ayudando a menudo por sus dos inseparables Zeus y Apolo (dos doberman al estilo "Los niños del Brasil"). Rick (Larry Manetti) gerente del Club Kamehameha y TC (Roger E.Mosley) el afroamericano chofer de helicóptero, eran los socorridos colegas de Magnum, los tres escombatienes del Vietman.

Magnum era ligón, simpático caradura y carismático, que vivía en una casa de lujo en el paraiso y además conducía un Ferrari. Nada de eso era suyo. Por eso era lo más parecido a Kerouac en la América yupi de la era Reagan; no poseía nada, pero disfrutaba de todo. Lógicamente miles de preadolescentes en los primeros ochenta ya tenían claro lo que querían ser de mayor. Así que ya saben, si un día de estos ven pasear un trentañero con bermudas, camisa hawaiana y bigote, que de vez encando arquea las cejas; por favor, no se confundan, no se trata de una version veraniega y bigotuda de Carlos Sobera.

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